Archivo
La Literatura es una ventana, un espejo
La disciplina de la imaginación.
Antonio Muñoz Molina.
Desde mi punto de vista, la tarea del que se dedica a introducir a los niños y a los jóvenes en el reino de los libros es la de enseñarles que éstos no son monumentos intocables o residuos sagrados, sino testimonios cálidos de la vida de los seres humanos, palabras que nos hablan con nuestra propia voz y que pueden darnos aliento en la adversidad y entusiasmo o fortaleza en la desgracia. Decía Ortega y Gasset que los grandes escritores nos plagian, porque al leerlos descubrimos que están contándonos nuestros propios sentimientos, pensando ideas que nosotros mismos estábamos a punto de pensar. En este sentido, yo no creo que el escritor sea alguien aislado de los otros y singularizado por el genio o el talento. El escritor, más bien, sería el que más se parece a cualquiera, porque es aquel que sabe introducirse en la vida de cualquier hombre y contarla como si la viviera tan intensamente como vive su vida misma.
La literatura, pues, no es aquel catálogo abrumador y soporífero de fechas y nombres con que nos maltrataba mi profesor de sexto, sino un tesoro infinito de sensaciones, de experiencias y de vidas que están a nuestra disposición igual que lo estaban a la de Adán y Eva las frutas de los árboles del Paraíso. Gracias a los libros nuestro espíritu puede romper los límites del espacio y del tiempo, de manera que podemos vivir a la vez en nuestra propia habitación y en las playas de Troya, en la calles de Nueva York y en las llanuras heladas del Polo Norte, y podemos conocer a amigos tan fieles y tan íntimos como los que no siempre tenemos a nuestro lado, pero que vivieron hace cincuenta años o cinco siglos. La literatura nos enseña a mirar dentro de nosotros y mucho más lejos del alcance de nuestra mirada y de nuestra experiencia. Es una ventana y también es un espejo. Quiero decir: es necesaria. Algunos la consideran un lujo. En todo caso, es un lujo de primera necesidad. […]
Porque la literatura no está sólo en los libros, y menos aún en los grandilocuentes actos culturales o en las conversaciones chismosas de los literatos. Donde está y donde importa la literatura es en esa habitación cerrada donde alguien escribe a solas a altas horas de la noche, o en el dormitorio donde un padre le cuenta un cuento a su hijo, que tal vez dentro de unos años se desvelará leyendo un tebeo, y luego una novela. Uno de los lugares donde más intensamente sucede la literatura es un aula donde un profesor sin más ayuda que su entusiasmo y su coraje le transmite a uno solo de sus alumnos el amor por los libros, el gusto por la razón en vez de por la brutalidad, la conciencia de que el mundo es más grande y más valioso que todo lo que puede sugerirle la imaginación. La enseñanza de la literatura sirve para algo más que para descubrirnos lo que otros han escrito y es admirable: también para que nosotros mismos aprendamos a expresarnos mediante ese signo supremo de nuestra condición humana, la palabra inteligible, la palabra que significa y nombra y explica, no la que niega y oscurece, no la que siembra la mentira, la oscuridad y el odio.
Gracias por enviarme este bonito texto y rescatarlo entre los dos en la larga noche que rememoramos la quema de libros de la Bebelplatz. Carles
http://morganfitzjamesjr.blogspot.com/
Dichos alicantinos. Definitorios
Déu li dona faves al que no té quixals. Dios le da habas al que no tiene muelas (habas tostadas, no frescas). Igual les ocurre a los que no pueden disfrutar de su fortuna por falta de salud.
Eres més tranquil que un pont. Eres más tranquilo que un puente. Exageración digna de un andaluz.
Tiraor de farina i replegaor de segó. Derrochador de harina y recogedor de salvado. Esta contradicción se da en personas que por una parte dilapidan y por otra ahorran hasta el céntimo.
Tenir un perdigó en l’ala. Tener un perdigó en el ala. Estás tocado. Cuídate, porque ese pequeño mal puede crecer.
Tenir el cap ple de teranyines. Tener la cabeza llena de telarañas. No discurres, no haces trabajar el cerebro.
Fill de sa mare. Hijo de su madre. Por no nombrar otra clase de hijo…
Calçat i vestit a son pare. Es un calco de su padre. Se dice más como elogio que como reproche de alguien no presente.
Més lleig que pegar-li a un pare. Más feo que pegarle a un padre.No es sólo feo. Es mucho más..
DICHOS ALICANTINOS
!Feina, fuig!. Huye, trabajo. No querer nada con el trabajo
¡Hala valent! Hale valiente! Expresión que sirve para estimular a quienes trabajan o hacen algo arriesgado, sin que quien lo dice ponga de su parte ningún esfuerzo.
Del bol tira qui vol. / De la red tira quien quiere. Y es cierto. Cuando son muchos en un esfuerzo común, si alguien afloja, no se nota
Mestre, té feina? / Maestro, tiene trabajo?. Pregunta en cierto modo irónica, pues se hace precisamente con ánimo de obtener una negativa igualmente informal.
El més tonto fa rellotges. El más tonto hace relojes
Cuando no se ha terminado un trabajo en el tiempo previsto. El más tonto hace relojes
T`ha agarrat el bou. Te ha cogido el toro. No se ha terminado el trabajo a tiempoFragmento del libro: Dichos Alicantino de PEPE GIL. Ilustraciones Valenzuela.
Comentarios recientes